jueves, 26 de marzo de 2015

Un planetario "Open 3D"

Este planetario "Open 3D" que suena así como muy americano, lo tenemos bien cerquita, en la provincia de Lérida. Desde hace apenas quince días, el Parque Astronómico del Montsec con el primer planetario "Open 3D'" del mundo en su Centro de Observación del Universo (COU). Y si... por supuesto que se puede ir con niños de todas las edades. De hecho los menores de 5 años no pagan entrada.
¿Qué tiene de diferente este planetario? Pues que permite contemplar el cielo con la cúpula totalmente abierta y, a su vez, poder disfrutar de una proyección en tres dimensiones.
Para los que nos gusta disfrutar de las estrellas, impresionante...

En el 2014,  Montsec obtuvo  la certificación de Destino Turístico por la Fundación Starlight, vinculada a la Unesco, la Unión Astronómica Internacional (IAU) y la Organización Mundial del Turismo (OMT) por su labor en “la protección de los cielos nocturnos”.

Para llegar hay que dirigirse al municipio de Àger (La Noguera), a unos 3,5 km del casco urbano, junto al camino que conduce al Coll d'Ares.

Para información específica, podéis visitar su web.

miércoles, 11 de marzo de 2015

Matera y los Sassi

Podría tratarse de un grupo de rock, pero no... Matera es una de las principales ciudades de la región de Basilicata, situada en el sur de Italia. 
En Matera, que ha sido elegida como sede italiana de la Capital Europea de la Cultura 2019, se encuentra uno de los asentamientos más antiguos y curiosos del mundo: los Sassi. Los Sassi son un conjunto muy peculiar de casas excavadas en la roca. Son Patrimonio de la Humanidad.
La región de lo que hoy es Matera ha estado habitada desde el paleolítico. Los sassi se originan a partir de asentamientos prehistóricos. Muchas de estas «casas» son realmente sólo cavernas, y las calles en algunos lugares de los sassi a menudo se ubican en los tejados de otras casas. Fue en el siglo VII cuando unos monjes llegaron huyendo de Asia Menor y se escondieron bajo las rocas construyendo habitáculos y capillas, conservadas algunas de ellas hasta hoy.
Se han contabilizado un centenar de capillas perforadas en la roca aunque sólo unas cuantas de ellas pueden visitarse. Entre ellas, destacan las de Conviciano de San Antonio, Santa María de Idris y Santa Lucia alle Malve. Son inglesias rupestres (chiesi rupestri),  sencillas, con un único altar y algún un fresco, a menudo ubicado en el lado opuesto al barranco; otras son un complejo entramado de cavernas con amplias cámaras subterráneas, que se piensa que los monjes rupestres y cenobitas usaban para meditar.

Es recomendable empezar la visita a esta peculiar ciudad en la plaza Vittorio Veneto. En ella podemos encontrar una enorme cisterna hidráulica que permaneció escondida durante décadas y eso que no es pequeña, será como un campo de fútbol. El precio de la entrada es de 2 euros por persona. Las explicaciones están todas en italiano, pero sirve para hacerse una idea. Hoy en día, sobre esta cisterna de agua que abastecía la población de Matera se levanta la moderna plaza que une el legado histórico con el presente.

En  esta  plaza Vittorio Veneto, un precioso balcón ofrece vistas inmejorables al barranco  donde se pueden ver en dos zonas orográficamente diferenciadas: el Sassi Caveoso y el Sassi Barisano. La ciudad se encuentra en ángulo oblicuo respecto a un pequeño cañón, que ha sido erosionado a lo largo de los años por un pequeño arroyo, el Gravina. El Sassi Caveoso es el más antiguo.
Para comprender mejor la forma de vida de los habitantes de los Sassi, se puede visitar en el Sassi Caveoso, la Casa Gruta di Vico Solitario, cerca de la Iglesia de San Pietro Caveoso. Este mueso es un típica casa gruta, con los muebles y utensilios de épocas antiguas. El precio de la entrada es 1.5 euros.

Esta ciudad recuerda en su aspecto a Jerusalén y alguna de las ciudades de Oriente Próximo. De hecho sus calles han sido usadas como escenarios para grabar películas entre las que se encuentra La Pasión de Cristo (Mel Gibson 2004)

Si viajas con niños, es mejor olvidar el carrito en el hotel. Las calles son estrechas y empinadas. Por lo demás no hay ningún problema, a los niños les encantará sumergirse en un lugar tan especial.

Otra cosa, que hay que hacer si viajas a esta ciudad, es probar el pan de Matera. ¡Es delicioso!

Matera no tiene aeropuerto. Está a unos 80 km de la ciudad de Barí, la cual si tiene aeropuerto (Vueling tiene conexiones directas desde Barcelona). La compañía de autobuses Marino conectan Matera con Milan, Ancona, Bologna, Chianciano, Fiuggi, Napoli, Novara y  Parma. La compañías Marozzi y Liscio conectan Matera con Roma, Florencia, Pisa y Siena.

¿Te animas a descubrir este lugar tan especial?

lunes, 9 de marzo de 2015

Dragones en Barcelona

Nos gustan los dragones y Barcelona es una de esas ciudades plagada de ellos. Lo mejor es descubrirlos mientras paseas por la ciudad, pero por si alguno es un prisillas, aquí os dejo unas cuantas pistas para encontrar alguno.
En la Avinguda de Pedralbes 7 encontramos la finca Güell, el dragón de su puerta es Ladón, fiero guardián de la entrada del jardín de las hespérides, que según la mitología fue matado por Hércules, según narra el poema L'Atlàntida, de Jacint Verdaguer. Este fantástico dragón, de más de cinco metros de envergadura, con fauces y dientes recortados, alas de murciélago y cola en espiral, sorprende por su ferocidad.
Preciosos son los dragones de piedra de la majestuosa fuente del parque de la Ciutadella. también conocida como Gran Cascada o Cascada Monumental. Esta situada cerca de la entrada por el Paseo Lluís Companys, donde se encontraba el Arco del Triunfo que daba la bienvenida a los visitantes de la Exposición de 1888.

Enorme es el dragón del parque de la Espanya Industrial, junto a la estación de ferrocarril de Barcelona-Sants, que con sus 32 metros de longitud y 150 toneladas de peso es un divertido tobogán.

Listas para ser fotografiadas esperan las cuatro dragonas (si, si, son chicas...) talladas en la madera de la pastelería Foix de Sarrià (Carrer Major de Sarrià, 57). Y ya que estamos aquí, podemos disfrutar de uno de sus riquísimos hojaldres de nata y chocolate.

Muy famoso por aparecer en muchas de las guías de viaje de Barcelona, es el bello dragón azul de estilo oriental de la casa de los Paraigües de la Rambla, un edificio premodernista de Josep Vilaseca; precioso de admirar mientras paseamos por las Ramblas. Enfrente de este dragón, en unos edificios próximos al Mercat de la Boquería, se contemplan una serie de dragones clásicos en sus azoteas. Sólo hay que ir un poco atento para descubrir como nos observan desde allí.

Otro dragón muy popular es el que aparece como relieve en la fachada de la calle del Bisbe. Muy cerquita, en la fachada lateral de la Catedral de Barcelona, podemos descubrir el dragón luchando contra el caballero, y las gárgolas que rodean todo su perímetro. Junto a las escaleras de la Catedral también se puede contemplar un escudo flanqueado por dragones alados con aspecto humano. 

Si vas buscando dragones, cual cazador, no hay que olvidar los dos dragones que en la reja del jardín del Museo Frederic Marès, en la Plaza de Sant Iu 5, sobresalen sin pudor. En este lugar fue donde donde habitó la Santa Inquisición, y que se inauguró en 1948 para acoger la obra de este artista.

En el interior de la Catedral del Mar, en la misma sala donde se encuentra una representación de la Vírgen negra de Montserrat podemos encontrar una representación tallada en madera de la leyenda de Sant Jordi y el dragón. Este dragón tiene connotaciones de monstruo marino, muy apropiado para el lugar donde se encuentra.

Quizás los dragones más pequeños de Barcelona son una pareja engarzada en los tiradores de las puertas del Pati dels Tarongers, en el Palau de la Generalitat. No mediarán más de diez centímetros.

Algunas farolas de la Barcelona histórica también están decoradas con dragones de hierro forjado.

¿Te animas a buscar dragones por Barcelona?